The Bravery puede ser fácilmente puesto en relación con la camada de grupos “The…” que en su conjunto han dado cuerpo a lo que muchos identifican como un new wave revival (como por ejemplo The Killers), por lo que el sonido que presenta este disco difícilmente podría ser algo desconocido o novedoso para quien haya escuchado radio durante los últimos meses o haya visto MTV durante más de un par de segundos.
El primer single del disco, An Honest Mistake es una carta de presentación impecable. Es vintage, clásica, recordable, enérgica… tiene todas las características para convertirse en el himno de The Bravery, y quizás esto mismo pueda jugarles en contra, ya que al escuchar el resto del disco no puedo dejar de sentirme decepcionado. Realmente no hay en él ninguna canción que pueda hacerle el peso, aunque ello no significa que todo sea una basura: Fearless y Tyrant Mouth son para mí los restantes destellos en esta colección de once canciones. A las restantes las calificaría de meramente escuchables; tras un rato se hacen monótonas, demasiado parejas y opacas.
En conclusión, más que rescatar el disco, rescataría el single. El resto del disco, a quien le interese.