Fernando lo recordaba en un post de Andrés Nieto sobre semántica, ayer re-descubro este tip también en en una traducción de Armonía de un post de Dave Shea e incluso la W3 lo recomienda: nombra a tus clases e ids (class/id
) en relación con su función, no con su aspecto.
Los buenos nombres no cambian
Piensa en por qué quieres que algo se vea de determinada manera, y no realmente cómo debería verse. El aspecto siempre puede cambiar, pero las razones para darle un determinado aspecto permanecen.
Un ejemplo muy claro está en las clases que solemos ocupar para controlar el aspecto de las imágenes que acompañan a un post: hace ya un tiempo solía preferir que se mostraran flotando a la izquierda, por lo que creé una clase llamada .imgleft
. Pasó el tiempo y empecé a preferir las imágenes flotando a la derecha del texto, por lo que edité el CSS ¡y quedé con una clase “imagenizquierda” que en realidad mostraba las imágenes a la derecha!
Por eso es que ahora al publicar [Satori->] preferí crear clases con nombres relacionados a su función —ahora tengo dos clases para insertar imágenes en posts: postimgtn
(por post image thumbnail o “miniatura de imagen en post”) y postimgfull
para imágenes de mayor tamaño. Si decidiera cambiar la forma de mostrar estas imágenes no caería en absurdos como antes.